Idas mentales

De las cosas que pasan

Qué pasa, chiquelines. Aqui estoy otra vez, y otra vez con la intención de escribir más a menudo.

Como estamos en navidad, pues habrá que felicitar las navidades, o las pascuas, o el año nuevo o lo que sea, algo en general. No pienso hacer chistes sobre las cantidades increibles de comida que hacen las madres, ni de las moñas de tus tíos, ni de la llantina de tu abuela. Tampoco de la gente que solo en navidad se acuerda de los demás, y te hacen visitas con sus hijos solo para ver si les das el aguinaldo (se escribe así?), y escuchas como se lo quita el padre al hijo en el portal. No me pienso quejar de los putos borrachos que cogen el coche y están a punto de matarte, ni de los que piensan, que como es navidad, pueden ir andando por el medio de la calle y tu a 10 por hora detrás con la primera metida, porque es navidad, y en navidad a los conductores nos tienen que dar por culo. Mucho menos voy a comentar nada de las ONG's que nos bombardean con imágenes repugnantes de amputaciones y enfermedades a la hora de comer o cenar, mi estómago no tiene la culpa de que los dirigentes de los paises sean unos hijos de puta, sin embargo mi bolsillo si acusa los euros en donaciones durante todo el año. Tampoco escribiré nada del constante acoso de los no fumadores, o ex-fumadores que a cada minuto te recuerdan que ya te falta menos para no poder fumar. A ver, cacho de gilipollas, en la actualidad en mi curro no puedo fumar, ya me tengo que ir a la calle, y enteraros todos de una puta vez que en los bares se va a poder fumar si el dueño lo quiere, asique os jodeis, cojones, mucho quejarse del puñetero tabaco, pero de la capa de ozono y el efecto invernadero, la contaminación de rios y el hambre en el mundo no decimos ni pio, bastardos. (Me he despachao, si, pero es que no sabeis que agobio, que ni en mi casa puedo, vienen visitas y les molesta...pues no vengas, carajo!)

Y muchísimo menos de los típicos correos navideños de gente que tienes en el messenger, y tú sabes que te tienen como no admitido, y aún así te mandan el correíto felicitandote las fiestas. Capullo, hablame durante todo el año, no te acuerdes de mi solo en navidad. Y acordarse es mucho, porque le dan a "Enviar a todos" y se quedan tan anchos.

Si la navidad es una mierda! Qué tiene de especial esta época del año? Las vacaciones y los regalos. Asique dejemos todos de ser tan hipócritas, salgamos, bebamos, riamos, comamos hasta reventar, y el que pueda, que se acueste con quien quiera las veces que le dejen. Y esto no tiene que ser asi solo en estas fechas, sino durante todo el año.

Simplemente odio la navidad por la falsedad de la gente. Si me quieres tanto, demuestramelo un día como el 16 de junio, no te esperes siempre a la misma puta fecha.

He dicho.

Y ahora, a hartarse de marisco.

 

De mirar quién baila (y cae, y se parte la crisma)

En mi casa, se baila. En pocas casas se puede decir, pero en la mía se baila. Madre andaluza, con mucha gracia (vale, padre conquense, con menos gracia, pero mucha técnica), muy grandes bailarines (bailantes, diría mi niño).

Muchos años dando clases de baile de salón (lo reconozco, yo también, incluso competía de niña, tanto en flamenco como el baile de salón), comprando colecciones de dividís de bailes, y viendo exhibiciones de gente de todas las edades.

Ahora, los lunes (desde hace bastante tiempo), en la primerísima de televisión, salen unos cuantos famosetes, ke dicen entrenar 4 horas a la semana.

Sin embargo, eso no es baile de salón ni pollas en vinagre, son simple, y llanamente, coreografías.

Ahora, lo mejor es el hip-hop, el tango, o el vals. Yo me parto el ojal. Y más viendo, a Carmen Sevilla, o a la ex-mujer de Álvarez-Cascos. O escuchando las canciones ke ponen como hip-hop.

Y lo peor de todo...no gana en ke mejor baila, sino el más simpático (o el ke más dinero le pasa a la cadena).

Como dice mi padre, solo les falta bailar reggetón (o como se escriba). 

Un día de estos, veremos a David Civera bailando a son de Kiss una coreografía de Rock.

Dios, ke fallo! Si ahora rock se le llama al Canto del loco...

De no saberse los números

Me llaman el martes por la tarde los del curro, que necesitan mis papeles. Les digo que no me ha dado tiempo a tenerlos todos, que los de las administraciones son mu pesaos. La chica se ríe. Me dice que lo que me falta no es necesario hasta el día de la incorporación, si puedo ir el miércoles a Castellana 14x a entregarlos, metro de Cuzco. Le digo que claro, que cómo no. Como no me he enterado del último número, lo miro en internet. Ok, el 141...
El miercoles despierto. Tengo que ir a Hacienda que está en Usera, y luego en Cuzco a entregarlo todo.
Llego a Hacienda con un plano que me quería llevar a la otra punta de Usera. Pero los ancianitos, tú les preguntas, y ellos te responden lo mejor que pueden, y recopilando la información de 4 jubilados (pobrecitos, es que solamente hay ancianos en ese barrio?) llego a la administración.
Allí todo el mundo majísimo, no como en el paro, que al tío le faltó morderme por preguntarle si las etiquetas de la renta me las daban ellos o no.
Total, ya tengo mis pegatinas, me compro una botellita de zumo de naranja y espero el autobús para Atocha. Claro, con las obras, yo con una falda blanca y escotazo al cuello, me vi atrincherada entre la marquesina y los abueletes que también esperaban el autobús porque me sentía como Marilyn y la faldita.
Total, que al cabo de un autobús y dos metros, llego a Cuzco. Le pregunto a un señor con bigote que por donde crecen los números. El hombre contesta, rascándose la mata de pelo facial "Crecen por la columna, no? Como todos los bichos". Despues de reirnos y darle fuego, me dice que el número que busco está a la derecha, edificio marrón.
La insistencia de este hombre por preguntarme que si seguro ke iba a la planta 13 de ese edificio me desesperó y me despedí de él.
Llego al 141. Me siento en una marquesina a fumarme un cigarro. Entonces noto a mi alrededor decenas de miradas, el callejó vacío...de personas y lleno de policías que me miran raramente. Yo sigo a lo mio con mis cascos. Termino el cigarro, y entro en el edificio. Si había munipas fuera, dentro era criminal. Otra vez la misma mirada de "Qué coño hace esta aqui", asique cuando el portero me pregunta que a que planta voy, todas las cabezas se vuelven hacia nosotros
-Voy a la planta 13
-Tú? A la planta 13?
-Esto...si...
-Y te puedo preguntar a qué?
-A entregar unos papeles para entrar
Risas generales
-No te lo recomiendo
-A ver...en la 13 no está XXXXXXX
-Esto, no....
-Y se puede saber que hay?
-LA FISCALÍA ANTICORRUPCIÓN
Y ala, todo el mundo descojonandose. Pero lejos de avergonzarme, empecé a seguirle el rollo al portero, que nunca se sabe, que quizá me hiciese falta pasar allí unos dias, etc etc
Llamé a la muchacha con la que había quedado...y era el 147.

Hoy me enamoré

Andando por la estación de Embajadores, salí del tren para comprar un billete que me llevase hasta Fuenlabrada, con mis cascos puestos y la cabeza en las nubes. Salí hacia la taquilla, me quité los cascos. Compré el billete. Volviendo a ordenar el caos del bolso, se me olvidó que llevaba los cascos arrastrando.
Y entonces lo sentí. El escalofrío que empieza en la espalda, llega a la cabeza, y te hace el nudo en el estómago. La sensación de quererte comer el mundo, de un abrazo enorme. Levanté la cabeza y allí estaba, delante mio, alrededor mio, en todos lados. Quise correr y olvidarme de todo, pero no pude. Me quedé sintiéndolo, buscándolo, parada en mitad de la estación. La gente pasaba, no parecían notar nada y yo no podía entender como no lo sentían. Entonces llegó el tren, ya llegaba tarde. Levanté la cabeza, cogí un Euro, y se lo di al muchacho que tocaba la guitarra y que me recordó el amor que tengo dentro, el que he usado y el que me queda por dar a la persona que más me abarca. Me dió las gracias, y yo a él.
El mejor euro gastado en toda mi vida. Por una vez fui completamente feliz en un viaje en tren.