De comer en la oficina
Visto que entramos a las 8 de la mañana y salimos a las 6 de la tarde, curramos donde Cristo perdió las chanclas y en el centro empresarial donde curramos solo hay un Vips, un Club Sandwich y un restaurante más caro que la madre que me parió, nos llevamos la comida en el taper de toa la vida para comer en la cafetería (o vending, que queda más guay). Un día ensaladita, otro macarrones, otro gazpacho, otro arroz...La gente suele ir a comer entre las 2 y las 4 de la tarde. Asique, a nadie se le ocurre sentarse en la cafetería (donde como mucho, pueden estar 20 personas sentadas) a tomarse un café. A nadie? Noooooooooooo...porque existen:
LOS PESADOS DEL CAFÉ Y LA SOBREMESA!!!
Si chiquelines. Son aquellos que, aunque vean que no hay sitio libre, y que tú estas depie esperando con el taper en la mano sentarte para comer, no mueven ni un dedo, sino que siguen sentaditos, con su café y su charleta. Te paseas por delante suyo, pero nada, como si no te viesen. Pero si que te ven, porque transparente no eres, y aunque hagas ruido con el tenedor en el taper, ahí siguen, con el culo apolillao en la silla.
Cuando les sale de los cojones se levantan y se van, a velocidad cerocoma, y tu tienes las tripas que les dabas un bocao que los dejabas secos.
1 comentario
Nazgulillo -
Sigo buscando -seguro que infructuosamente-. Suerte con el curro, con el barrio y con la Renfe. Y con los pesados del café. Yeah.